- ¿Cómo pueden ustedes programar su vida alrededor del fútbol?- Es que los partidos están chéveres pues
- pero no los entiendo (a los hombres), encima me aburro
- porque no quieres entendernos
- nooo, es que no me gusta
- mira, si es igualito que las novelas, solo que cada 4 años, no te quejes
Así iba la conversación con mi amiga Cathy. Y pues, pensándolo a conciencia es eso: una novela, 64 capítulos seriados de hora y media programados en un mes, cada 4 años, con el rating más espectacular que se pueda soñar. Uno no ve el Mundial por el fútbol, en realidad lo hace por el (melo)drama, por ese enfrentamiento primario, básico y maniqueo del bueno contra el malo, aunque no haya malo ni bueno como en las novelas, sólo motivos diferentes, más en la tradición de los folletines chinos.
Entrando a semifinales, ya con mi España fuera, y desembarcados los sudamericanos (mal por Argentina, bien por Brasil), no me quedan razones personales. Siguen corriendo las apuestas y los dramas, Zidane que se quiere retirar como campeón, un dueño de casa que está encontrando el amor propio que perdió en la guerra, una Italia con vendetta y los portugueses queriendo hacer su historia. Solo resta sintonizar las últimas dosis de fútbol mundial ¿o no? Todas las novelas son iguales, y todos los partidos son iguales, también.